Marinera en tierra

   Hace un par de fines de semana volví a uno de los locales por los que solía salir en la Zona del Casco de Zaragoza, El Jardín del Temple, y me sorprendió el cambio que ha dado, ha cambiado un poco su imagen y ha madurado, le ha pasado un poco más o menos como a mí.

   El Jardín del Temple era uno de esos locales en los que al entrar lo primero que se notaba, además del olor a cerveza, el serrín del suelo para absorber la bebida que caía. Era un local oscuro pero precioso de estilo modernista del siglo XIX, con un suelo ajedrezado que me encanta y un pequeño jardín en la parte trasera al que nunca pudimos salir, solo lo podíamos disfrutar desde la enorme cristalera pero que ahora sí que pude y ver y es el sitio en el que mi amiga Mapi me hizo estas fotos.

   La verdad es que la salida al jardín siempre ha sido una de obsesiones y no entendía por qué no nos dejaban, supongo que sería por el ruido de la música, así que cuando vimos que la gente entraba por una puerta pequeña y no salía los seguimos y salimos, después de casi 20 años queriendo hacerlo, al jardín.

   Si no conocéis este local acercaros aunque solo sea para ver los azulejos de la pared de barra o los espejos y muebles antiguos y, si sois de los que pasasteis largas o cortas noches en él, volved porque os sorprenderá el pequeño cambio y los recuerdos os sacarán unas cuantas sonrisas y algún ataque de risa, seguro.

   Espero que os haya gustado este post. Gracias por vuestras visitas y comentarios.

   Un beso,

   Patricia 

Bolso: Victoria's Secret (new)

Vestido: H&M

Botines: Mustang

   Y para terminar The Pore-fessional de Benefit, un producto para tapar los poros y que suelo utilizar antes de maquillarme de verdad, con ésto quiero decir cuando aplico base y un montón de cosas más, no cuando solo me aplico polvos sueltos a diario. Ayuda a disimular e, incluso, hacer desaparecer los poros de zonas complicadas como la nariz.