Edificios clásicos
Una de las cosas que más me sorprendieron en París, fue la cantidad de puentes que unen y comunican las dos orillas de la ciudad. Zaragoza es una ciudad que ha vivido prácticamente de espaldas al Ebro, mientras que en París ha sido y continúa siendo, una de sus principales vías de comunicación.
El Puente de la Concordia, desde el que están hechas la mayoría de las fotos que publico hoy, une la Asamblea Nacional con la Plaza de la Concordia y desde allí se ve perfectamente la Catedral de Notre Dame y, el verano pasado, la aguja de esta preciosa catedral gótica y que desgraciadamente se quemó hace poco.
El Pont de la Concorde (su nombre en francés) uno los distritos VII y VIII. En 1830 fue cuando comenzó a denominarse como lo conocemos ahora pero anteriormente tuvo otros nombres como Puente de Luis XVI o Puente de la Revolución.
En 1975 fue inscrito como monumento histórico y en 1999 se incluyó dentro de la delimitación del ámbito de Riberas del Sena en París y, por lo tanto, declarado patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Ya en la plaza de la Concordia lo que más destaca, al menos para mí, es el obelisco de Lúxor proveniente de Luxor en Egipto. Del que ya os hablaré otro día.
Espero que os guste el post y gracias por leerlo.
Un beso,
Patricia
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