La fiebre de los 2000
Foto hecha en La Pineda de Salou
Un vestido igual pero en verde llevó la Jesulina para el bautizo de Andreita.
Organizando cajas encontré la de las fotos, aunque sabía donde estaba no la había visto desde hace bastantes años, y cuando empecé a revisarlas pensé que tenía que publicar un post con la ropa que llevaba en los 2000, cuando tenía veintitantos años.
Una de las cosas que he visto es que el rosa ha sido siempre mi color favorito, en la mayoría de las fotos llevo algo de ese color; también que los cortes de pelo eran muy modernos pero ahora no creo que me los volviese ha hacer, sobre todo el flequillo tan corto; y por último, que cuando eres joven te quejas de todo, sobre todo del peso, pero que ahora con casi 42 años me encantaría estar como en aquella época.
También que decir que algunas de las prendas que aparecen en este post todavía las tengo y sigo llevándolas y todas las recuerdo perfectamente y las echo un poco de menos porque me gustaban mucho, como la falda vaquera de U de Adolfo Domínguez con brillitos.
Espero que os guste este post. Gracias por vuestras visitas y comentarios.
Un beso,
Patricia
La Granja de San Ildefonso
Camiseta: Yhocos de Cine
Falda: U de Adolfo Domínguez
Deportivas: Nike
El Alcázar de Segovia
Camiseta: El Corte Inglés
Falda: U de Adolfo Domínguez
Deportivas: Nike
Gafas: Emporio Armani
Camiseta y pantalón: tienda local
Vinaroz
Camiseta: El Corte Inglés
Pantalón: H&M
Chancletas: El Corte Inglés
Valencia
Jersey: Yhocos de Cine
Camiseta y pantalón: mercadillo
Tívoli, Barcelona
Camiseta y pantalón: tienda local
Jersey: Yhocos de Cine
Camiseta: tienda local
Este fue mi primer coche, un Seat Ibiza negro, luego tuve otro rojo
Comentarios
Publicar un comentario
Muchas gracias por escribir comentarios, me encanta ver cada día las estadísticas y saber cuántos visitáis este blog, que cada día sois más, así que imaginad lo que ocurre cada vez que veo un comentario.
Si no veis vuestro comentario publicado inmediatamente es porque los filtro para evitar que aparezcan vuestros correos electrónicos y, por supuesto, los comentarios malintencionados; pero intentaré hacerlo lo más rápido que me sea posible.
Un beso,
Patricia